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En 2015, APH VisionAware realizó una publicación de Audrey Demmitt, mentora de pares, sobre una nueva aplicación llamada “Be My Eyes”. En la publicación, Audrey decía: “Tengo discapacidad visual y hace poco probé esta aplicación por recomendación de mi optometrista John Henahan, que también escribió sobre su experiencia”. El Dr. Henahan dijo: “Me encanta ser oftalmólogo… Como oftalmólogos, disponemos de diversas herramientas especiales para ayudar a las personas con problemas de vista, pero a veces no hay nada que pueda sustituir a un par de ojos para ver algo. Al iniciar un chat de video, [una persona no vidente o con visión reducida] puede pedir ayuda a un amigo o familiar si está disponible. El problema es que los amigos o familiares no siempre están disponibles… Ahí es donde usted y yo podemos ayudar. Recientemente se ha lanzado una nueva y brillante aplicación llamada Be My Eyes”.
Año 2023
En caso de que no haya oído la noticia, APH ConnectCenter se complace en anunciar nuestra reciente asociación con Be My Eyes, la aplicación que muchos adultos no videntes o con visión reducida han llegado a amar y utilizar para obtener ayuda de un voluntario vidente. Be My Eyes incluye ahora APH ConnectCenter en la sección “Ayuda especializada” de la aplicación. Basta con tocar para buscar “Ayuda especializada”, seleccionar Organizaciones relacionadas con la ceguera y tocar “APH ConnectCenter” para conectarse en segundos con un agente que puede ayudar con preguntas y proporcionar recursos relacionados con la vida con visión reducida y ceguera.
¿Cuál es la historia de Be My Eyes?
Según la publicación de Audrey, la idea de Be My Eyes tiene su origen en el artesano danés de muebles Hans Jørgen Wiberg, que empezó a perder la vista a los 25 años. Quería facilitar la vida cotidiana de las personas no videntes o con visión reducida y ofrecer una nueva oportunidad flexible de voluntariado. En palabras de Wiberg: “Es flexible, solo se necesitan unos minutos para ayudar, por lo que la aplicación es una buena oportunidad para el individuo moderno y ocupado con energía para ayudar a los demás”.
¿Qué hace la aplicación Be My Eyes?
Gracias a la aplicación Be My Eyes, se ayuda a las personas no videntes o con visión reducida a “ver” para completar una tarea que requiere visión. A través de una videollamada directa, la aplicación ofrece ayuda de un voluntario vidente que puede ver y describir la situación utilizando la videocámara del teléfono inteligente del usuario. Así, la persona no vidente o con visión reducida y el voluntario vidente trabajan juntos para resolver el problema.
¿Cómo ayudó a Audrey en 2015?
“En mi primera llamada, contestó alguien en Estocolmo (Suecia). Era por la mañana para mí y por la tarde para él. El voluntario me ayudó a elegir entre un café normal y una cápsula de café descafeinado para mi Keurig. Solo tenía que apuntar con el teléfono a lo que quería ver y aparecía en la cámara. La llamada duró más o menos un minuto. Tras dar las gracias al voluntario, pulsé en la parte inferior de la pantalla para desconectar la llamada”.
Otros colegas opinan sobre sus experiencias recientes
Elizabeth Sammons
Elizabeth tiene una historia similar con respecto a recibir la ayuda de alguien de otro país. “De vuelta de una reunión, tenía previsto comer en un restaurante chino por mi cuenta, pero cuando llegué la puerta estaba cerrada. Llamé a Be My Eyes para ver si había algo en la puerta que explicara por qué estaba cerrado. La joven que contestó tenía acento, pero no tuvo problemas para leer el cartel que informaba del cierre inesperado en medio de la pandemia. De fondo, se escuchaban las bocinas de los autos, pero tenían un sonido distinto al que estoy acostumbrado en Estados Unidos. Después de nuestra charla de trabajo, le pregunté dónde estaba. “Estoy en El Cairo, Egipto”, dijo. “Yo estaba esperando mi autobús”. Así, una voluntaria de lengua árabe de Oriente Medio leyó el cartel de un restaurante chino a un estadounidense. Me encanta”.
Empish Thomas
“Hoy estaba intentando usar mi nuevo abrelatas a pilas llamado Kitchen Mamma. Estoy cansada de los abrelatas manuales, así que compré este. Bueno, puse las pilas bien, pero no pude abrir la lata por mi cuenta.
Así que llamé a Be My Eyes y una pareja intentó ayudarme. Era difícil sujetar el teléfono y el abrelatas y evitar que la lata se resbalara. Pero pude hacerlo. Lo curioso es que me daban indicaciones, pero yo no las entendía. Pensé que tenía que colocar la parte superior donde se encuentra el imán de metal en la parte superior de la lata. El imán tenía que estar en el borde de la lata, donde se encuentra la tapa. Me di cuenta de mi error y los voluntarios me ayudaron mucho y tuvieron mucha paciencia cuando intenté resolverlo varias veces. Incluso se ofrecieron a buscarlo en Google y encontrar instrucciones en línea. Cuando todos nos dimos cuenta, el abrelatas empezó a funcionar. ¡Genial! Fue una buena experiencia, ¡y pude abrir esa maldita lata!”.
Deanna Noriega
“Vivo en una zona residencial de bajos ingresos. El verano pasado entrené con un nuevo perro guía. Sabe indicarme cuándo debo tener cuidado al pisar, guiarme para sortear los obstáculos que se interponen en nuestro camino y evitar que entre en contacto con ramas, postes, coches aparcados y otros peligros. Sin embargo, no sabe adónde quiero ir hasta que se lo indico. Me confundí cuando cruzó en diagonal una intersección. Para reducir costos, los cortes de acera se colocaron en el vértice de la esquina. En cuanto al perro, al llevarme al centro del bordillo que estaba abajo, me alineó con un bordillo similar cortado en diagonal en la esquina. No había tráfico, así que no detecté el problema hasta que había recorrido cierta distancia. Me di vuelta para intentar volver sobre mis pasos. El auricular Bluetooth que utilizo para acceder a una aplicación GPS se quedó sin batería y se apagó. Confuso e inseguro, llamé a un voluntario de Be My Eyes. Permaneció en línea, haciéndome ir a la intersección más cercana y girar lentamente hasta que pudo ver la señal de la calle. Luego me describió los edificios que podía ver para ayudarme a verificar por dónde tenía que seguir para volver a casa. Habló conmigo unos 20 minutos hasta que tuve la seguridad de saber cómo llegar a casa”.
Más información:
Obtenga más información o descargue de la aplicación. La aplicación Be My Eyes es gratuita y está disponible para usuarios de iPhone o Android.
Esté atento a las próximas publicaciones sobre el funcionamiento de Be My Eyes para los usuarios de APH ConnectCenter. APH ConnectCenter ayuda a las personas no videntes o con visión reducida de todas las edades a lograr una mayor independencia y el éxito a lo largo de la vida, proporcionándoles información y recursos. Además de contactarse con APH ConnectCenter a través de la aplicación Be My Eyes, puede llamar al 1-800-232-5463 (de lunes a viernes, de 8 a. m a 8 p. m., ET) o enviar un correo electrónico a [email protected].