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Nota del editor: Con motivo de la proximidad de las fiestas, Audrey Demmitt, enfermera registrada y colega de VisionAware, habla sobre cómo controlar la depresión durante las fiestas. En su publicación, brinda excelentes consejos para sobrellevar la situación e información sobre el tratamiento.
Las fiestas son duras para quienes luchan contra la depresión, la ansiedad y el estrés. Reconozcamos que para muchos de nosotros, las reuniones familiares, las compras interminables y las fiestas caóticas pueden dejarnos abatidos y agotados. Es un momento que puede resultar especialmente difícil para alguien que perdió la vista recientemente. A muchas personas ciegas o con visión reducida les resulta estresante ir de compras, cumplir con obligaciones sociales, moverse entre la multitud y gestionar las relaciones familiares. Y de eso se tratan las fiestas. La pérdida de la vista cambiará sin duda la experiencia e incluso puede desencadenar una depresión.
La soledad y el aislamiento social predicen la depresión
El aislamiento social es uno de los factores más importantes de la depresión, especialmente durante las fiestas. Muchas personas ciegas o con visión reducida están aisladas por falta de transporte, por estar desempleadas y por la ansiedad que conlleva salir a lugares públicos. Esto puede provocar soledad y depresión. De hecho, las investigaciones demuestran que hasta un tercio de los adultos con degeneración macular asociada a la edad padecen también depresión, que puede ser aun más debilitante. Las personas deprimidas se retraen y evitan las interacciones sociales, lo que a menudo agrava los sentimientos de soledad y los síntomas de la depresión.
Las fiestas también son duras para quienes sufren una pérdida, como la muerte de un ser querido, el fin de una relación o incluso la pérdida de la vista. Recuerda cómo eran las cosas antes y puede sentirse triste o ansioso por el futuro. Esta pena debilita nuestra energía, nos distrae y hace que celebrar sea imposible. Aunque es natural lamentarse por una pérdida, y no hay un calendario para el duelo, éste puede prolongarse y convertirse en depresión.
¿Depresión o nostalgia navideña?
Es normal sentirse decaído y triste a veces, pero si el bajo estado de ánimo dura más de dos semanas, va acompañado de otros síntomas y es lo bastante grave como para alterar la vida cotidiana, puede tratarse de una depresión.
Síntomas emocionales
- Pérdida de interés por la vida o apatía
- Pérdida de placer en las cosas que solía disfrutar
- Sentimientos de inutilidad, culpa o vergüenza
- Falta de esperanza
Síntomas físicos
- Fatiga y disminución de la energía
- Insomnio, especialmente al levantarse temprano por la mañana
- Sueño excesivo
- Dolores o molestias persistentes, cefaleas, calambres o problemas digestivos que no se alivian ni siquiera con tratamiento
- Aumento o disminución del apetito
- Aumento o pérdida de peso
La depresión afecta a todos los aspectos de la vida
El dolor físico y emocional provocado por la depresión puede afectar al trabajo, las relaciones y las aficiones de una persona. Provoca problemas de concentración y de toma de decisiones. Si no se trata, la depresión puede agravarse y poner en peligro la vida.
La depresión no es un signo de debilidad ni un rasgo negativo de la personalidad; es una afección médica y es tratable.
¿Quién corre peligro?
Las personas con antecedentes familiares de depresión tienen un mayor riesgo, ya que se cree que la genética desempeña un papel importante. Las mujeres tienen el doble de probabilidades de sufrir depresión que los hombres. La depresión se desencadena por el estrés de cambios vitales importantes, como una muerte en la familia, un divorcio, una enfermedad grave o una incapacidad. Muchos expertos creen que está causada por una diferencia en la estructura del cerebro y la función química que está determinada biológicamente.
Tratamientos para la depresión
Terapia
La terapia de conversación es eficaz en el tratamiento de la depresión leve a moderada. La terapia cognitivo-conductual se centra en cambiar los pensamientos y comportamientos que conducen a la depresión. A menudo, basta con unas semanas o meses de terapia para aliviar la depresión.
Medicamentos
Los antidepresivos afectan a los niveles de serotonina y norepinefrina, sustancias químicas del cerebro que regulan el estado de ánimo. Pueden tardar unas semanas en alcanzar su plena eficacia, y puede ser necesario ajustar las dosis. Existen muchas opciones, de modo que si un medicamento no funciona, otro lo hará. Las investigaciones han demostrado que el tratamiento más eficaz para la depresión es la combinación de terapia de conversación con medicamentos.
Entorno social
Dado que la soledad va de la mano de la depresión, es importante desarrollar una red de apoyo social. Esto puede incluir unirse a un grupo de apoyo, encontrar una comunidad de apoyo en línea o planear ver a amigos y familiares más a menudo. Incluso participar en un club de lectura o anotarse a clases en el gimnasio puede ayudarle a relacionarse con otras personas y evitar el aislamiento.
Otros tratamientos
Otros tratamientos incluyen el ejercicio regular y la terapia con mascotas, que han demostrado mejorar los síntomas de leves a moderados. El ejercicio libera sustancias químicas cerebrales que elevan el estado de ánimo y favorecen el aumento de la autoestima, la mejora del sueño, el alivio del estrés y mejora de la energía. Las mascotas, e incluso los animales de servicio, tienen efectos positivos en nuestro estado de ánimo y nuestra salud. Acariciar a nuestros animales disminuye las hormonas del estrés, reduce la tensión arterial y libera oxitocina, que produce una sensación de bienestar y vinculación emocional. Nuestros animales ofrecen amor incondicional y compañía, lo que también tiene un efecto terapéutico.
No espere a pedir ayuda
La depresión te hace sentir impotente y desesperanzado. A medida que empeora, puede ser una pendiente resbaladiza, por lo que es importante buscar tratamiento tan pronto como se reconozca. La depresión no es una mala palabra, y no hay por qué avergonzarse de buscar ayuda. La buena noticia es que es muy tratable, y más del 80 % de las personas mejoran con medicación, terapia de conversación o una combinación de ambas.
Si usted o un ser querido experimenta síntomas de depresión, hable de ello y busque atención médica. Puede realizar un chequeo de depresión en línea para determinar si está deprimido.
No lo haga solo. Visite a su médico de atención primaria para comunicarle los resultados del chequeo y hablar sobre el diagnóstico y el tratamiento. Si tiene pensamientos suicidas o un plan para hacerse daño a usted o a los demás, acuda al servicio de urgencias más cercano o llame al 911. O llame a una línea de asistencia telefónica: puede obtener ayuda confidencial gratuita en cualquier momento llamando al 800.273.8255. Con tratamiento, puede sentirse mejor y volver a manejar la vida, incluso más allá de las fiestas.
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