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Ir a la universidad puede ser un paso emocionante en tu vida, pero también puede ser caro. Las becas pueden ayudarte a asistir a la universidad a bajo coste o sin coste alguno, pero el proceso de solicitud puede parecer inicialmente desalentador. Aquí tienes sugerencias sobre dónde empezar tu búsqueda y consejos para preparar tu solicitud.
Dónde empezar tu búsqueda de becas
La universidad a la que vas a asistir es un punto de partida fantástico para tu búsqueda. El portal de ayuda económica de tu centro ofrece un cómodo centro de todas las ayudas que ofrece. Tómate tu tiempo para examinar todas las becas y hacer una lista de los programas para los que reúnes los requisitos. Algunas becas están disponibles para todos los estudiantes, mientras que otras están restringidas a departamentos específicos, especialidades u otros subconjuntos de estudiantes.
Es posible que puedas encontrar becas para estudiantes con discapacidad a través de tu centro de estudios o de la comunidad local. La oficina de recursos para discapacitados de tu centro de estudios puede ponerte en contacto con becas para estudiantes discapacitados. Del mismo modo, deberías consultar en las oficinas de discapacidad de tu ciudad y de tu estado los programas que puedan ofrecer.
Además, aprovecha las oportunidades que ofrecen organizaciones de consumidores como el Consejo Americano de Ciegos y la Federación Nacional de Ciegos. Ambas organizaciones ofrecen becas estatales y nacionales cada año.
Por último, si estás trabajando, también puedes tener en cuenta tu lugar de trabajo. Algunos empleadores incluyen el reembolso de la matrícula u otras prestaciones educativas que pueden reducir tu coste de asistencia.
Aunque no se trata de una lista exhaustiva, debería ayudarte a iniciar tu búsqueda de becas.
Consejos para tu solicitud
Cuando encuentres una beca que quieras solicitar, revisa cuidadosamente los requisitos y compila tu solicitud. Crear una carpeta para todos los documentos relacionados con la beca, como el expediente académico y las cartas de recomendación, puede ser útil si vas a solicitar varias becas.
Hablando de recomendaciones, asegúrate de aprovechar tus contactos académicos y profesionales. Algunas personas que pueden recomendarte son antiguos profesores, colegas o tu jefe. Asegúrate de que las personas que te recomienden te conozcan lo suficiente como para ofrecer una recomendación sólida y detallada. Además, la carta no debe ir dirigida a un programa de becas específico.
Ensayos para becas
Es habitual que una beca solicite una redacción como parte del proceso de solicitud. Asegúrate de revisar qué tema(s) te piden que cubras en la redacción. Tu respuesta a la pregunta de la redacción debe ajustarse específicamente a lo que quieren saber sobre ti o por qué reúnes los requisitos para la beca. Tal vez desees elaborar un esquema o una lista de viñetas que ampliarás en tu redacción.
Áreas adicionales a considerar
¿Tienes algún logro académico o profesional? También puedes recurrir a cualquier experiencia extracurricular o de voluntariado que tengas. Por último, si eres ciego o tienes baja visión, puedes incorporarlo a tu redacción.
Al escribir tu redacción, es fundamental que no subestimes tus logros. Tu redacción es tu oportunidad de venderte como el mejor candidato para la beca. Ser humilde sobre tu trabajo no te ayudará.
Entrevista para la beca
Muchas becas entrevistarán a sus mejores candidatos para una beca. Antes de la entrevista, revisa las directrices de la beca. Repasa tu redacción. Piensa en las preguntas que puedas tener para el entrevistador. Vístete de forma profesional y asegúrate de que el área que te rodea en una entrevista virtual está limpia y presentable.
El escozor de no recibir una beca
Puede que te rechacen una beca que hayas solicitado. Esto es especialmente cierto en el caso de becas estatales o nacionales competitivas. Aunque esto es decepcionante, no refleja tu carácter ni tus aptitudes académicas. Si te invitan a volver a presentarte el año que viene, aprovecha la oportunidad. Puede que te denieguen una beca un año y te la concedan al año siguiente.
Por último, recuerda mantener una actitud positiva y seguir presentando solicitudes. El proceso de solicitud de becas a veces puede resultar tedioso, pero te lo agradecerás cuando puedas centrarte en tu educación en lugar de preocuparte por cómo te la vas a permitir.