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Nota del editor: Cuando a Aimie Strachan le dijeron que su hija tenía que llevar un parche en el ojo durante treinta minutos al día, buscó un libro para explicarle el proceso. Al no encontrar un libro, decidió escribirlo ella misma. Aime Strachan comparte su historia.
Soy Aimie, esposa, madre de dos hijos y docente de primaria en el Reino Unido. Cuando mi hija, Matilda, tenía un año y medio, me di cuenta de que tenía el ojo vuelto hacia dentro, y la llevé al médico. A los dos años le recetaron gafas, aunque nos dijeron que quizá no fueran suficientes para su ojo más débil. A los dos años y medio le recetaron a Matilda un parche en el ojo. Simplemente nos pusieron un parche en el ojo y nos dijeron que tenía que llevarlo tres horas al día.
Como docente, siempre he utilizado los libros para explicar e introducir nuevos temas. Los libros fueron una gran herramienta para explicar a mi hijo los nuevos desafíos que enfrentaba, como comenzar la escuela, aprender a usar el baño y adaptarse a la llegada de una nueva hermanita. Automáticamente quise comprar libros que explicaran cómo colocarle el parche a la pequeña Matilda. He buscado en Internet y no he encontrado ningún libro que explique cómo poner parches en los ojos a un niño pequeño. Me quedé muy sorprendida, frustrada y triste.
Escribir el libro
Después de darme cuenta de que el libro que quería no estaba escrito, compartí mis frustraciones en las redes sociales. Recibí tanta comprensión de otras familias en situaciones similares que me motivó a escribirlo yo misma. Nunca había escrito un libro y no tenía experiencia en publicaciones; ¡era un mundo completamente nuevo!
Encontré a mi increíble ilustradora, Daisy Winter (daisy.draws.illustrations), a través de las redes sociales y fue capaz de interpretar mis dibujos en borrador. Tenía una idea muy clara de cómo quería que fuera el libro y hablé con algunos editores que realmente no entendían la necesidad de un libro sobre parches/ambliopía. Decidí publicar mi libro yo misma. Durante la pandemia, trabajé en mi computadora portátil para redactar el libro. No fue fácil, pero la alegría de pulsar por fin el botón de publicar fue increíble.
¿Está pensando en escribir un libro?
A cualquiera que esté pensando en escribir un libro, le digo que lo haga. Yo era simplemente una madre frustrada que quería un libro que sentía que mi hija necesitaba y merecía. La amabilidad y el apoyo de amigos, familiares y desconocidos en las redes sociales realmente me mantuvieron centrada. Matilda’s Eye Patch: A positive children’s guide to eye patching se vende en Japón, España, Italia, Australia, Estados Unidos, Canadá y Reino Unido.
Una cita que tengo en la cabeza es:
“Ya no acepto las cosas que no puedo cambiar. Estoy cambiando las cosas que no puedo aceptar”.