Lenguaje asertivo para niños en edad prescolar no videntes o con visión reducida
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Muchas veces, personas bienintencionadas supondrán que su hijo/a necesita ayuda y lo ayudarán sin preguntar. Su hijo/a tendrá que saber decir “No, gracias” con firmeza y respeto.
Otras veces, su hijo/a querrá o necesitará ayuda con tareas o entornos desconocidos. Y tendrá que saber pedir ayuda de manera respetuosa.
Además de aceptar y rechazar la ayuda, es bueno que su hijo/a aprenda a hablar de sus deseos, intereses, opciones, sentimientos y necesidades de adaptación.
Su hijo/a tiene innumerables oportunidades de expresarse:
- Decir sus preferencias
- Aclarar malentendidos
- Pedir ayuda
- Rechazar la ayuda ofrecida
- Comunicar ideas
Por no hablar de cuando su hijo/a le diga que no comerá lo que usted ha preparado con tanto esmero. Son oportunidades perfectas para enseñarle a comunicarse con amabilidad y confianza.
Probablemente, esté familiarizado con los términos de comunicación pasiva, agresiva y asertiva. La pasividad y la agresividad se encuentran en los extremos opuestos del espectro de la comunicación respetuosa.
Términos de comunicación
En la comunicación pasiva no se demuestra respeto por uno mismo; quien es pasivo permanecerá en silencio en lugar de discrepar, decir no o rechazar ayuda.
En la comunicación agresiva no se demuestra respeto por los demás; una persona agresiva plantea exigencias sin tener en cuenta las necesidades o los sentimientos de todos los implicados.
Equilibrada perfectamente en el centro del espectro de la comunicación respetuosa, en la comunicación asertiva se demuestra respeto por uno mismo y por los demás.
En la comunicación asertiva, el orador expone hechos o sentimientos para promover la honestidad. La comunicación asertiva permite negociar con el objetivo de que ambas partes se sientan satisfechas cuando sea posible.
Ejemplos de comunicación asertiva para niños en edad prescolar
- A Samantha se le cae un juguete y grita de frustración cuando no lo encuentra. Educación: “Samantha, en lugar de gritar, puedes decir: ‘Mami, estoy frustrada’. Se me cayó el juguete. ¿Puedes ayudarme a encontrarlo?”.
- El hermano de Juan le pregunta si Juan hará sus tareas por él. Juan, para evitar el conflicto, dice que sí. Educación: “Juan, tú eres responsable de tus tareas y tu hermano de las suyas. Puedes decirle educadamente: ‘Te quiero, pero no voy a hacer tus tareas por ti”.
- Otro niño le quita a Nida el libro de las manos. Educación: “Nida, cuando alguien te quita algo, puedes decir: ‘Por favor, no te lleves mi libro. Lo estaba leyendo. Cuando termine de mirarlo, lo compartiré contigo’”.
- El comentario insensible de un amigo hirió los sentimientos de Dre. Educación: “Dre, sé que es fácil quedarse callado cuando se hieren los sentimientos. Sin embargo, Jasmine es tu amiga, y no quieres empezar a sentirte enfadada o amargada con ella al callar tus sentimientos. Puedes ser sincera con ella y hacerle saber que su comentario hirió tus sentimientos”.
- Le pide a sus tres hijos que se pongan de acuerdo sobre una actividad familiar para el fin de semana. Patrick, el más pequeño, exige que la familia vaya al parque infantil. Dice que no irá si eligen otra actividad. Educación: “Patrick, los deseos de los tres son importantes. Me alegro de que sepas lo que realmente quieres hacer este fin de semana. Ahora pregúntale a tus hermanas qué quieren hacer. Pregúntales y podrán negociar los tres. Quizá podamos ir a los tres lugares este mes, o quizá puedas llegar a otro acuerdo”.