Cómo elegir juguetes y crear una zona de juego para su hijo/a no vidente o con visión reducida

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Niña jugando en un pelotero

Al elegir juguetes para los niños, solemos fijarnos en su aspecto. Los niños videntes sonríen ante peluches y personajes de dibujos animados. Sin embargo, para un niño no vidente o con visión reducida, la apariencia pasa a un segundo plano. Para que el juego sea divertido y estimulante, opte por juguetes multisensoriales.

Multisensorial significa que implican más de un sentido. Por lo tanto, busque juguetes que hagan ruido, tengan diversas texturas y brinden estimulación visual. Estos juguetes estimulan tres de los cinco sentidos del bebé. Si su hijo/a tiene algo de visión, los colores vivos y de alto contraste pueden resultarle atractivos. Pero piense también en juguetes con sonidos, texturas variadas o sorpresas ocultas para explorar con los deditos.

La elección de los juguetes no es solo una cuestión de diversión, sino también una oportunidad de aprendizaje y desarrollo. Para favorecer el crecimiento de su bebé o niño/a pequeño/a, piense en juguetes que le supongan un reto. Los juguetes con botones para girar, tirar y empujar pueden ser divertidos y estupendos para mejorar la destreza manual.

Piense en juguetes que imiten objetos domésticos comunes, como un teléfono de juguete que suena al pulsar un botón. También podría ser un teclado de computadora, un teléfono o un control remoto. Pueden servir como un “juguete” práctico para que su hijo/a se familiarice con una herramienta que utilizará con frecuencia en el futuro, como un braillewriter o un teclado de computadora de verdad.

Hay que tener en cuenta que muchos niños no videntes o con visión reducida pueden no preferir la textura de los peluches. Los juguetes de plástico, aunque son coloridos, suelen tener formas y texturas similares, lo que los hace menos atractivos.

Algunas de las características que debe buscar en los juguetes para su hijo/a son las siguientes:

  • Que sean irrompibles y sin bordes afilados
  • Piezas móviles divertidas de mover, presionar o tirar (asegúrese de que estén bien sujetas y sean demasiado grandes para que, si el bebé se las lleve a la boca, no pueda tragárselas)
  • Sonido: por ejemplo, un pato de madera que grazna al tirar de él o un ratón de plástico blando que chirría al apretarlo pueden ser atractivos
  • Superficies con múltiples texturas o, de algún otro modo, agradables e interesantes al tacto

Cómo crear una zona de juegos para niños no videntes o con visión reducida

  • Para fomentar el tiempo de juego de su hijo/a, asegúrese de que dispone de un espacio designado y seguro que pueda considerar suyo. Este lugar especial puede estar en su dormitorio, en un rincón acogedor de la cocina o en un lugar conveniente de cualquier habitación. Puede colocarlo entre dos estanterías bajas, utilizar un mueble con varias estanterías contra una pared o simplemente disponer de un par de cajas o cestas espaciosas para guardar los juguetes. El objetivo es brindarle a su hijo/a un entorno seguro y familiar en el que pueda jugar, sentirse a gusto y comprender mejor su entorno.
  • Coloque los juguetes más pequeños en un contenedor poco profundo o en una bandeja con un borde elevado. Eso evitará que se deslicen o rueden.
  • Anime a su hijo/a a rodar, gatear, patinar o caminar para conseguir un juguete por sí mismo. Eso lo ayudará a desarrollar buenas habilidades motoras. Además, si siempre le lleva juguetes puede que no se dé cuenta de dónde están los juguetes o de que puede elegir el que quiera.
  • Ayude a su hijo/a a guardar los juguetes de forma organizada. Puede sugerirle que ponga todos los juguetes mecánicos en un cajón; los bloques y juguetes similares, en otro; y los juguetes blandos y esponjosos, en un tercer cajón. Puede pegar un juguete identificativo de cada tipo en cada cajón para ayudar a su hijo/a pequeño/a a saber dónde encontrar cada tipo de juguete.