Motricidad fina para niños pequeños
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Para los bebés ciegos o con baja visión, la motricidad fina desempeña un papel fundamental en la capacidad de explorar e interactuar con su entorno. Sirven de base para muchas destrezas vitales importantes, como el autocuidado, la comunicación y el éxito académico.
Una de las principales formas en que los bebés ciegos o con baja visión desarrollan la motricidad fina es a través del tacto. Explorando objetos con las manos, los dedos e incluso la boca, los bebés pueden desarrollar su conciencia espacial y adquirir la motricidad fina necesaria para manipular objetos y realizar tareas como alimentarse, vestirse y asearse.
Como padre o madre, puede contribuir al desarrollo de la motricidad fina de su bebé proporcionándole una variedad de objetos seguros y táctiles para que los explore. Esto puede incluir juguetes con diferentes texturas, formas y tamaños y objetos domésticos como tazas, cucharas y otros utensilios.
También puede realizar actividades que animen a su bebé a utilizar las manos y los dedos de forma diferente. Esto puede incluir pintar con los dedos, jugar con plastilina o practicar ejercicios de alcance y prensión.
Además del tacto, también es importante proporcionarle información verbal y auditiva para ayudarle a comprender el mundo que le rodea. Describiendo objetos y acciones con detalle y utilizando un lenguaje descriptivo para proporcionar contexto, puede ayudar a su bebé a desarrollar una comprensión más completa de su entorno y a desarrollar las habilidades cognitivas y lingüísticas necesarias para comunicarse con eficacia.
Recuerde que el desarrollo de la motricidad fina requiere tiempo y paciencia; cada niño se desarrolla a su propio ritmo. Con su cariño y apoyo, su bebé ciego o con baja visión puede desarrollar la motricidad fina que necesita para explorar su mundo y desarrollar todo su potencial.
En el principio
En los primeros meses de vida, su bebé puede empezar a desarrollar habilidades motoras básicas como alcanzar, agarrar y sostener objetos. Alrededor de los tres meses, pueden manipular juguetes y objetos, ya que sus habilidades motrices están empezando a emerger. Pueden ser capaces de agarrar objetos que se les ponen en las manos y empezar a mover los brazos y las piernas en respuesta a estímulos.
Para favorecer el desarrollo de la motricidad fina de su bebé en esta etapa, puede ofrecerle una variedad de juguetes seguros y adecuados para su edad que fomenten la exploración.
- Peluches
- Juguetes texturizados y fáciles de agarrar, como sonajeros, palitos de canarios, o con sonidos de patos.
- Juguetes con algún sonido, como los cascabeles, estimularán los sentidos de su bebé y le animarán a extender la mano y explorar su entorno.
- Utilizar un gimnasio de actividades o una manta de juego para colgar juguetes, incluyendo algunos que hagan ruido, se iluminen y que sean fáciles de sostener.
No olvidemos las muchas oportunidades de participar en actividades que implican tacto y contacto físico, como los suaves masajes o el contacto piel con piel durante la alimentación y el cambio de pañales. Estas actividades no sólo fomentan el desarrollo de la motricidad fina, sino que también ayudan a reforzar el vínculo entre usted y su bebé.
Sujetar, explorar y divertirse
Alrededor de los seis meses, la motricidad fina de su bebé puede estar desarrollándose rápidamente. Es probable que sea capaz de sujetar y manipular objetos con ambas manos y que empiece a transferir objetos de una mano a otra. También pueden empezar a desarrollar un agarre más fuerte y ser capaces de sostener objetos durante periodos de tiempo más prolongados.
A esta edad, es importante ofrecer a su bebé muchas oportunidades para explorar y jugar. Ofrezca una variedad de juguetes con diferentes formas, texturas y tamaños para animarlos a usar sus manos y dedos de distintas maneras. Los juguetes blandos, como los animales de peluche o las pelotas de tela, pueden ser una buena opción, ya que son fáciles de agarrar para su bebé. Otros objetos, como un Oball o pelotas sensoriales, serán más fáciles de agarrar y proporcionarán un estímulo sensorial adicional. A medida que interactúa con su hijo para desarrollar estas habilidades, es importante utilizar la técnica de mano debajo de mano para apoyarlo.
Algunas actividades que favorecerían la motricidad fina son:
- Apilar bloques, vasos o bloques magnéticos para ayudar a las habilidades de apilamiento.
- Jugar con clasificadores de formas.
- Llenar y verter objetos en recipientes de diversos tamaños.
Desarrollo del Agarre de Pinza y Mayor Compromiso
Alrededor de los nueve meses, la motricidad fina de su bebé irá progresando. Es probable que sean capaces de alcanzar y agarrar objetos con mayor precisión y exactitud, utilizando el agarre de pinza (pulgar e índice) para tomar objetos más pequeños. También pueden comenzar a usar sus dedos para explorar y manipular objetos; pueden golpear, sacudir o agitar objetos para explorar la causa y el efecto. Sentando a su hijo con la espalda contra su vientre, puede utilizar la técnica de mano debajo de mano para mostrarle cómo golpear, agitar o manipular juguetes.
Puede utilizar lo que tenga en casa para apoyar la motricidad fina, como jugar con cuencos para mezclar, cucharas de madera y Tupperware. También puede ofrecer alimentos para picar con platos o cuencos de alto contraste, como cereales de color claro en un plato oscuro o arándanos en un plato o bandeja claros, para fomentar el uso de la pinza de agarre.
Actividades adicionales que favorecen el agarre con pinzas y el desarrollo de la motricidad fina:
- Proporcionar juguetes que animen a girar, retorcer y colocar objetos en un recipiente más grande.
- Usar tableros de actividades o juegos con una variedad de texturas.
- Ofrezca libros de cartón con texturas para que los exploren y comiencen a desarrollar habilidades para pasar hojas después de que haya separado las páginas.
- Dele al niño juguetes musicales como tambores, maracas, un xilófono o un teclado para que juegue.
- Arme cajas sensoriales con elementos grandes como cucharones, pompones, fideos grandes o cereal triturado para simular arena.
Iniciación a la resolución de problemas y a la autodefensa
A los 12 meses, la motricidad fina de tu bebé ha avanzado mucho. Podrán desarrollar una variedad de habilidades como agarrar, manipular objetos e incluso comenzar a alimentarse solos usando cucharas o tazas. También pueden estar preparados para colorear, pintar con los dedos y otras experiencias nuevas.
Las tareas de motricidad fina pueden empezar a ser más difíciles para su hijo. Ahora es el momento perfecto para apoyar las habilidades de autodefensa y resolución de problemas. Será fundamental que apoye a su hijo mientras trabaja en tareas más difíciles, como los rompecabezas. Puede enseñar a su hijo a pedir ayuda y a decir cuándo no quiere que le ayude. Ayudarles a modelar esta comunicación les ayudará a controlar el nivel de apoyo que creen que necesitan de usted y de los demás. Anime a su hijo cuando se frustre (y lo hará). Además, intente encontrar formas de ayudarles si la actividad necesita ser más accesible, como poner el rompecabezas en un tablero inclinado, añadir cinta de pintor de alto contraste o añadir sonido o luz para que la tarea sea más fácil de realizar.
Actividades divertidas para explorar con tu bebé de 12 meses:
- Jugar con pinturas con los dedos.
- Hacer plastilina comestible que su hijo pueda comer.
- Ofrezca paneles interactivos con cerraduras, objetos para girar o torcer, campanas para empujar, interruptores y otros botones para presionar.
- Fomente el uso de rompecabezas con texturas o rompecabezas para principiantes.
- Utilice libros Poke-A-Dot para que su hijo escanee con los dedos y presione mientras lee.
Recoger, construir y jugar
Su hijo de 18 meses está desarrollando y mejorando su motricidad fina. Es probable que puedan utilizar las manos y los dedos para manipular objetos con una precisión cada vez mayor, como pasar las páginas de los libros de cartón, utilizar una cuchara para recoger comida con ayuda del lateral de un cuenco o mostrar interés por construir y crear.
Es importante seguir desarrollando la fuerza de la mano mediante actividades y la práctica diaria. Trabaje con su hijo para mejorar las habilidades de alimentación al usar un tenedor para recoger o pinchar la comida. A medida que su hijo trabaje en habilidades más complejas, como enhebrar cuentas y construir, recuerde usar la técnica de mano bajo mano para brindar apoyo cuando sea necesario.
Actividades divertidas para apoyar el desarrollo en esta etapa:
- Jugar con bloques Duplo u otros conjuntos de construcción estilo Lego grandes.
- Utilizar un “Sit and Spin” con botones y ruidos en la parte superior.
- Jugar a “hacer de cuenta” con un granero o una casa de muñecas.
- Utilizar una mesa de agua para explorar lo vertido, el hundimiento y la flotación.
- Ensartar cuentas grandes.
- Manipular juguetes tipo «dimples» o «Pop-Its».
- Pintar, dibujar y hacer manualidades con distintos materiales.
- Arme una actividad con un recipiente sensorial usando nieve artificial, fideos, plumas, lentejas junto con cucharas, pinzas plásticas y tijeras de cucharón.
Emparejando, explorando y desarrollando fuerza.
Para los dos años, las habilidades motoras finas de su hijo habrán desarrollado significativamente, y podrán usar utensilios para alimentarse, enhebrar cuentas y construir torres con bloques. Los músculos siguen desarrollándose con los dedos y las manos de su hijo. Pueden empezar a explorar texturas similares y diferentes.
Algunas actividades a tener en cuenta a los 24 meses:
- Utilizar tijeras para principiantes para realizar cortes sencillos.
- Jugar con plastilina y herramientas para enrollar, cortar y crear modelos de objetos.
- Comenzar a trabajar en habilidades para vestirse como subir cierre del zipper, abotonarse y usar zapatos con velcro.
- Trabajar habilidades de autonomía en el baño, como lavarse el cuerpo, el pelo y la cara.
- Invite a su hijo a ayudarle a preparar meriendas, como cortar alimentos blandos utilizando la técnica de la mano bajo mano.
Perfeccionando habilidades y desarrollando la independencia
A los 30 meses, la motricidad fina de tu hijo seguirá progresando y perfeccionándose. Pueden llegar a ser más independientes a la hora de comer y vestirse. Continúe utilizando la técnica de mano bajo mano para brindar apoyo si es necesario.
El juego de simulación y el juego imaginativo pueden contribuir aún más al desarrollo de la motricidad fina. Jugar a disfrazarse y jugar con muñecas puede proporcionar oportunidades para practicar como subir el cierre del zipper, abrochar botones y simular alimentar a las muñecas bebé.
Algunas actividades en las que puede involucrar a su hijo:
- Fingir cocinar y comer con alimentos de juguete en una cocina de juguete.
- Disfrazarse con trajes imaginativos de profesiones como constructor, cocinero, oficial de policía o doctor.
- Participar en actividades sensoriales como verter en otros recipientes, clasificar texturas, remover y mezclar contenidos.
A medida que su hijo vaya adquiriendo independencia y desarrollando la motricidad fina, tendrá que seguir apoyándole y animándole cuando sus tareas empiecen a ser más complejas. Anime a su hijo a expresarse cuando necesite ayuda y brinde apoyo para desarrollar estrategias de resolución de problemas. Celebre y anime a su hijo cuando realice las tareas cuando demuestre su capacidad para resolver problemas.
Control y fuerza
A los tres años, la motricidad fina de su hijo ha avanzado mucho. Ahora pueden utilizar las manos y los dedos con mayor precisión y control. Esto les permite manipular objetos más pequeños y realizar tareas más complejas. Su hijo puede empezar a jugar juegos táctiles de coincidencia y otras actividades para incluir a otros niños y hermanos. Podrán seguir desarrollando su interés por el dibujo y la creación de obras de arte táctiles. Elegir vestirse o comer de forma independiente son signos de la confianza de su hijo en su motricidad fina.
Actividades para seguir desarrollando la motricidad fina:
- Jugar juegos táctiles de coincidencias como «Ruff’s House».
- Utilizar tableros de actividades para aprender a vestirse, para practicar con broches, con cierres zippers y con botones.
- Jugar a “hacer de cuenta” con varias herramientas de construcción, como un martillo, tornillo y sierra.
- Jugar a “hacer de cuenta” en un restaurante; usar alimentos de juguete para cortar, teteras para verter y tazones para mezclar.
- Plantar semillas para flores o un jardín.
- Verter los cereales o la leche de una taza en cuencos.
Recuerde que cada niño se desarrolla a su propio ritmo; es importante no comparar los progresos de su hijo con los de los demás. En su lugar, concéntrese en ofrecer a su hijo muchas oportunidades de practicar su motricidad fina a través del juego, el arte y otras actividades. Con paciencia y estímulo, su hijo seguirá creciendo y se convertirá en una persona capaz e independiente.