La violencia doméstica y las mujeres con discapacidad
This content is also available in:
English (Inglés)
Todos los días, cuando John se iba a trabajar, guardaba la silla de ruedas de Marie en un armario con llave y se llevaba el router de Internet y el teléfono móvil. Mary tenía problemas para moverse por la casa, no podía pedir ayuda y tampoco podía irse.
Larry se encarga de los medicamentos para la ansiedad, la depresión y el dolor crónico de Joan. Le da a Joan una dosis mucho menor de lo que le recetaron, por lo que ella vive con dolor y miedo constantes. Sin embargo, Joan depende de Larry para su cuidado diario y teme contarle a alguien que no recibe los medicamentos necesarios.
Definición de violencia doméstica
Mucha gente está confundida sobre qué es la violencia doméstica, sus causas y por qué las mujeres permanecen en relaciones abusivas. La violencia doméstica es un patrón de intimidación, presión y violencia. Incluye todo lo que el agresor hizo y la amenaza de lo que hará en el futuro. El único objetivo de la violencia doméstica es obtener y mantener el poder y el control sobre la víctima. A medida que pasa el tiempo, el patrón de abuso suele aumentar en frecuencia y gravedad. El maltrato puede ser verbal, físico, emocional, sexual o económico. Una persona que sufre de violencia puede ser de cualquier edad, etnia, clase, cultura, religión, profesión u orientación sexual.
Agresión sexual
La agresión sexual puede formar parte de la violencia doméstica o puede producirse por sí sola. Es cualquier contacto o conducta sexual que se produce sin el consentimiento explícito del receptor. Puede incluir actividades sexuales como las relaciones sexuales o sodomía forzadas, el abuso sexual infantil, el incesto, el contacto físico indebido y el intento de abuso sexual.
Comportamientos de acoso
Los comportamientos de acoso también suelen formar parte de la violencia doméstica. Aunque las definiciones legales de acoso difieren de una jurisdicción a otra, una definición básica de acoso es una conducta dirigida a una persona concreta que causaría temor a una persona sensata. El acoso es grave, a menudo violento, y puede agravarse con el tiempo.
Las mujeres con discapacidad son más vulnerables a la violencia doméstica
En la investigación también se sugiere que las mujeres con discapacidad tienen más probabilidades de sufrir violencia doméstica y agresiones sexuales que las mujeres sin discapacidad. Además, las mujeres con discapacidad denuncian abusos que duran más tiempo y son más intensos que los que denuncian las mujeres sin discapacidad.
Al igual que a las demás mujeres, quienes maltratan a las mujeres con discapacidad suelen ser personas conocidas, como su pareja o un familiar. Además, las mujeres con discapacidad corren el riesgo de sufrir abusos por parte de los profesionales de atención médica o los cuidadores. Los cuidadores pueden retener medicamentos y dispositivos de asistencia, como sillas de ruedas o soportes. Además, pueden negarse a ayudar con necesidades cotidianas como bañarse, vestirse o alimentarse.
Causas de la violencia contra las mujeres con discapacidad
La violencia contra las mujeres con discapacidad se produce debido a las actitudes hacia las mujeres junto con la vulnerabilidad derivada de las condiciones que son consecuencia de la propia discapacidad, como las siguientes:
- Menor capacidad física para defenderse.
- Dificultad para denunciar el maltrato debido a la falta de formas de comunicación accesibles.
- Inaccesibilidad a los servicios de información y asesoramiento debido a barreras en el entorno físico y a la falta de formas de comunicación accesibles (esto es sobre todo preocupante en el caso de las mujeres no videntes o con visión reducida).
- Disminución de la autoestima al no ser percibida como mujer sino solo como una persona con discapacidad o, lo que es peor, solo como su discapacidad.
- Mayor dependencia de otras personas para recibir cuidados.
- Miedo a denunciar el maltrato, ya que podría provocar la ruptura de los vínculos y la pérdida de los cuidados que pueda necesitar.
La violencia doméstica nunca es culpa de la víctima
La violencia doméstica y sexual, el acoso y el abandono nunca son culpa de la víctima. No se basan en el estrés, las drogas o el alcohol. Se deben a la elección activa del agresor de utilizar la violencia u otras tácticas intimidantes para controlar a su víctima.
Las víctimas suelen permanecer con su agresor por muchas razones, entre ellas económicas, culturales y, además, por el miedo a perder la custodia de los hijos. Lo que es más importante, las víctimas temen que aumente la violencia o temen la muerte si se marchan. El momento más peligroso para una víctima es cuando intenta marcharse. Esto puede deberse a que el agresor siente que está perdiendo el control sobre su víctima.
Para las mujeres con discapacidad, puede ser aun peor. Si son maltratadas por alguien en quien confían su cuidado, pueden sentirse atrapadas.
Las mujeres no videntes o con visión reducida tienen preocupaciones adicionales relacionadas con su visión. Una víctima señaló: “Me di cuenta de que mi visión se estaba utilizando en mi contra… (luego) obtuve información sobre mi visión y cómo utilizarla de forma más eficaz. Esto me devolvió la confianza”.
Ayuda para las víctimas de violencia doméstica
No están solas. Si es posible, pueden pedir ayuda a alguien de confianza, como un médico, familiar, amigo, vecino o miembro del clero. Además, se puede obtener ayuda de varias organizaciones nacionales y estatales contra la violencia doméstica y sexual. A continuación, encontrará diferentes enlaces que pueden ser de ayuda.
1-800-799-SAFE (7233)
1-800-787-3224 (TTY)
La línea directa nacional contra la violencia doméstica siempre está disponible. Personal capacitado ofrece servicios gratuitos de derivación específicos para la violencia de pareja. El personal habla inglés y español, y hay traductores disponibles para otros 129 idiomas. Ofrecen intervención en situaciones de crisis, derivación a centros de atención para la violencia doméstica y otros refugios y programas de emergencia, información y apoyo. Además, asesoran sobre refugios, defensa y asistencia, y programas de servicios sociales.
La Red Nacional para la Erradicación de la Violencia Doméstica (NNEDV, por su sigla en inglés) es una organización de defensa de derechos humanos que formaron las alianzas estatales contra la violencia doméstica, organizaciones aliadas y personas particulares. Desde la organización, se trabaja en estrecha colaboración con los miembros para conocer las necesidades de las víctimas y los programas de violencia doméstica y, luego, se las transmite a los responsables políticos nacionales.
En los Servicios de defensa de las mujeres sordas maltratadas (ADWAS, por su sigla en inglés) se capacita a las sobrevivientes sordociegas de violencia doméstica, agresión sexual y acoso para transformar sus vidas, al tiempo que se realiza el esfuerzo de cambiar las creencias y los comportamientos que fomentan y perpetúan la violencia. Además, se brindan servicios integrales a personas y familias, educación comunitaria y defensa de los sistemas y cuestiones políticas.
El Centro Nacional de Recursos contra el Acoso (NCVC, por su sigla en inglés) es un programa del Centro Nacional para las Víctimas de Delitos. Mediante la colaboración con socios locales, estatales y federales, en el Centro Nacional se aboga por el refuerzo de los derechos, la protección y los servicios para las víctimas de delitos; se ofrece educación, capacitación y evaluación; y es una fuente confiable de información actualizada sobre cuestiones relacionadas con las víctimas.
Red Nacional contra el Abuso Sexual, el Maltrato y el Incesto (RAINN)
Línea directa: 800-656-HOPE
La Red Nacional contra el Abuso Sexual, el Maltrato y el Incesto (RAINN, por su sigla en inglés) es la organización más grande del país contra la violencia sexual y gestiona la línea de atención telefónica las 24 horas al día, los 7 días a la semana. En la organización también se llevan a cabo programas para prevenir la violencia sexual, ayudar a las sobrevivientes y garantizar que los abusadores comparezcan ante la justicia. En RAINN, se brinda información sobre recursos en todo el país para sobrevivientes de abuso sexual, maltrato e incesto.
por Leslie Malkin (Licenciatura en Humanidades y Doctorado en Derecho), coordinadora de proyectos, Alianza de Nueva Jersey para Acabar con la Violencia Doméstica