Proteja el cuerpo de los peligros domésticos
Técnica de protección de la parte superior del cuerpo
Si aprende a utilizar de manera correcta la siguiente técnica de protección de la parte superior del cuerpo, el antebrazo actuará como un “paragolpes” para proteger la cabeza y la parte superior del cuerpo de plantas colgantes, puertas de armarios abiertas y puertas de habitaciones entreabiertas. Además, puede utilizar esta técnica cuando se agache para recoger objetos o compruebe el asiento de una silla antes de sentarse. Aunque tenga algo de visión y crea que está a salvo, no se arriesgue: nunca se agache sin utilizar esta técnica de seguridad.
Es importante recordar que esta técnica solo protegerá de manera parcial la zona de los hombros y el pecho y no le protegerá por debajo de la cintura ni le advertirá sobre la proximidad de desniveles, como escalones y escaleras. Para una protección máxima, debe utilizar técnicas de protección de la parte superior e inferior del cuerpo o un bastón blanco largo.
Realice los siguientes diez pasos:
- Levante el brazo más fuerte a la altura del hombro y extiéndalo delante del cuerpo como si estuviera apuntando hacia delante.
- Doble el brazo de modo que el antebrazo cruce el pecho y toque el hombro opuesto con la punta de los dedos.
- Aleje la mano de unos 25 a 30 centímetros del hombro.
- Puede calcular esta distancia visualizando una caja de zapatos o una regla a lo largo entre el hombro y la mano.
- Doble los dedos, sepárelos un poco y mantenga la muñeca recta mientras gira la palma de la mano hacia fuera, de modo que quede en dirección opuesta al cuerpo.
- Mantenga el codo a la altura del pecho mientras levanta el antebrazo en diagonal sobre el cuerpo hasta que la mano quede a unos 25 centímetros delante de la cara.
- Gire la palma de la mano hacia fuera con los dedos apuntando en un ligero ángulo hacia la cara a fin de protegerlos de lesiones y permitir que el antebrazo sirva de amortiguador. Es importante mantener la mano y el brazo en esta posición para que la parte superior del cuerpo quede protegida de manera parcial.
- Al comienzo, es posible que solo pueda mantener esta posición durante uno o dos minutos. Sin embargo, con mucha práctica, será capaz de mantener esta posición durante períodos más prolongados. Si la mano y el brazo están “flojos”, no serán tan eficaces para proteger la cabeza y la parte superior del cuerpo.
- Si se le cansa el brazo, puede cambiar y utilizar el otro brazo, repitiendo los pasos anteriores para mantener la posición correcta.
- Si no puede levantar el brazo debido a la artritis, un accidente cerebrovascular o Parkinson, intente llevar una visera para protegerse la cara.
Técnica de protección de la parte inferior del cuerpo
Si aprende a utilizar de manera correcta la siguiente técnica de protección de la parte inferior del cuerpo, tu brazo actuará como un “paragolpes” para proteger la parte inferior del cuerpo de las encimeras de cocina, los bordes de las mesas, las mesitas de noche y los respaldos de las sillas.
Es importante recordar que esta técnica solo protegerá de manera parcial el estómago y la zona inguinal y no le advertirá sobre la proximidad de desniveles, como escalones, escaleras y rampas. Para una protección máxima, debe utilizar técnicas de protección de la parte superior e inferior del cuerpo o un bastón blanco largo, un perro guía o un guía humano.
Realice los siguientes ocho pasos:
- Coloque el brazo más fuerte hacia abajo como si estuviera apuntando al suelo.
- Coloque la mano con la palma delante y mirando hacia el muslo opuesto, aproximadamente de 25 a 30 centímetros (10-12 pulgadas) del cuerpo.
- Puede calcular esta distancia visualizando una caja de zapatos o una regla a lo largo entre el muslo y la palma.
- Doble los dedos, sepárelos un poco y mantenga la muñeca recta con la palma hacia el cuerpo, de modo que el dorso de la mano entre en contacto con cualquier objeto que encuentre.
- Intente mantener los dedos relajados mientras camina.
- Mantenga la mano y el brazo en esta posición para proteger la parte inferior del cuerpo.
- Al comienzo, es posible que solo pueda mantener esta posición durante uno o dos minutos. Sin embargo, con mucha práctica, podrá mantener esta posición durante períodos más prolongados.
- Si se le cansa el brazo, puede cambiar y utilizar el otro brazo, repitiendo los pasos anteriores para mantener la posición correcta.
Técnica de trailing (seguimiento al tacto)
La técnica de trailing (seguimiento al tacto) puede ayudarlo a localizar una puerta, caminar en línea recta o detectar la posición de objetos situados delante suyo en el mismo lado del cuerpo que el brazo extendido.
Esta técnica puede brindarle información útil sobre objetos cotidianos, obstáculos y peligros potenciales que puede encontrar al desplazarse por el hogar.
Además, puede brindarle una sensación de seguridad mientras camina, ya que le permite permanecer en contacto con paredes, encimeras, escritorios, mesas u otros tipos de superficies fijas.
Es importante recordar que esta técnica no le advertirá sobre los desniveles que se aproximan, como escalones y escaleras. Para obtener la máxima protección, debe utilizar la técnica de trailing (seguimiento al tacto) combinada con la técnica de protección de la parte superior o inferior del cuerpo, en función de sus necesidades en un entorno concreto.
Realice los siguientes diez pasos:
- Comience a lo largo de un tramo recto de pared en una zona despejada. Párese con la parte lateral del cuerpo a unos 15 centímetros (6 pulgadas) de la pared.
- Extienda la mano frente a usted más o menos a la altura de la cadera y en ángulo hacia el suelo, a unos 30 centímetros (12 pulgadas) del cuerpo.
- El dorso de la mano debe estar en contacto con la pared, con los dedos un poco ahuecados hacia la palma.
- Esto evitará que se lesione los dedos si entran en contacto con un objeto. Los dedos también actuarán como “paragolpes” para advertirle de los objetos que pueda encontrar.
- Camine poco a poco hacia delante mientras mantiene el brazo en esta posición y el dorso de los dedos, en especial los nudillos de los dedos anular y meñique, en contacto con la pared.
- Asegúrese de que el dorso de la mano esté siempre en contacto con una superficie mientras se desplaza.
- Cuando entre en contacto con un objeto o lo localice, dedique unos instantes a examinarlo e identificarlo.
- Si llega a una puerta, cruce la abertura y siga el trailing (seguimiento al tacto) del otro lado.
- Para obtener la máxima protección al cruzar la abertura de la puerta, se recomienda utilizar la técnica de protección de la parte superior del cuerpo o la técnica de protección de la parte inferior del cuerpo, dependiendo del entorno concreto.
- Al comienzo, es posible que solo pueda mantener esta posición durante uno o dos minutos. Sin embargo, con mucha práctica, será capaz de mantener esta posición durante períodos más prolongados.