Natación para niños ciegos o con baja visión

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Saca los bañadores y la crema solar: ¡es la hora de la piscina! Nadar es un bienvenido respiro del calor y un fenomenal ejercicio sin impacto para toda la familia.

Profundicemos en las consideraciones de accesibilidad para tu hijo ciego o con baja visión.

Consideraciones generales sobre la natación

  • Las gafas de natación son beneficiosas tanto si tu hijo es ciego como si tiene baja visión. Si nadan al aire libre o en piscinas con mucha luz, los niños sensibles a la luz pueden necesitar gafas tintadas. Estas gafas bloquean el agua y mejoran la visibilidad del carril para los que tienen baja visión.
  • Habla con tu hijo sobre las quemaduras solares y la importancia de la protección solar. Como los niños ciegos no ven la piel rosada, ayúdale a idear un plan para aplicarse sistemáticamente crema solar a intervalos regulares. Para una protección adicional en la piscina, tu hijo puede llevar un gorro de sol y/o camisetas de baño con FPS. La Organización Nacional para el Albinismo y la Hipopigmentación (NOAH) proporciona información útil sobre la protección solar.
  • Hablad sobre lo que veis mientras estáis en las instalaciones de natación. ¿Qué partes del cuerpo están cubiertas? ¿Dónde se cambian y se secan? ¿Hay gente duchándose, y cómo pueden hacerlo con modestia? ¿Hay diferentes normas de modestia en los vestuarios? ¿Puedes ver a otras personas bajo el agua, y qué están haciendo? Si hay socorristas, ¿qué hacen y pueden ver siempre a tu hijo?
  • Tu hijo debe utilizar su bastón o guía vidente para evitar tropezar en el agua. Al entrar en el agua, el niño puede apoyar el bastón en un lugar específico (si la instalación no está llena de gente) o dárselo a uno de sus padres o a un amigo para que lo apoye en la silla del niño.

Consideraciones sobre las clases de natación

  • Enseñar a tu hijo las brazadas básicas de natación antes de entrar en la piscina es beneficioso. Practica la contención de la respiración en la bañera. Introduce las brazadas en casa, con el niño tumbado boca abajo en un sofá.
  • Habla con el entrenador sobre la posibilidad de dar información a tu hijo con instrucciones físicas o modelando en lugar de dirigirle/corregirle visual y verbalmente. Haz saber al entrenador que debe advertir al niño antes de tocarle.
  • Si tu hijo lo permite, el entrenador puede utilizarlo como modelo para enseñar al equipo o a la clase una nueva técnica. Tu hijo recibirá instrucción práctica.
  • Oriéntate sobre la piscina y las instalaciones (incluidos los baños y vestuarios) antes de las clases. Para consejos específicos, no dudes en hablar con el especialista en orientación y movilidad de tu hijo.
  • Si tu hijo es excepcionalmente sensible a la luz solar, plantéate dar clases en una piscina cubierta o en una piscina al aire libre fuera de las horas punta.

Consideraciones sobre la natación laparatoria

  • Los marcadores de carril flotantes proporcionan información táctil a las personas ciegas o con discapacidad visual. Si tu centro no los utiliza, considera la posibilidad de colaborar con él para comprarlos o haz los tuyos propios utilizando cuerda y fideos de piscina intermitentes.
  • El final del carril puede marcarse auditivamente con música procedente de un altavoz impermeable, y/o visualmente mediante un elemento de contraste de color.
  • Algunas personas ciegas o con baja visión cuentan el número de brazadas que tardan en nadar por el carril.
  • Los nadadores de competición suelen utilizar un «tapper«. Un «tapper» es una persona experimentada que da golpecitos al nadador con una pértiga larga, indicándole el momento de girar.