Aprendizaje Incidental: ¿Qué es?

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¿Sabía que los educadores creen que más del 80 por ciento de lo que aprenden los niños les llega a través de la vista? Si le parece sorprendente, piense en lo que ocurre al entrar en una habitación. De un vistazo, podrá ver y comprender el contenido de la sala. Entendiendo quién está allí, qué está haciendo y, si hay una ventana en la habitación, incluso qué tipo de clima esta haciendo afuera. Gran parte de lo que aprenden los niños se adquiere de forma casi automática e instantánea, es decir, incidentalmente. Mientras observan a otros niños y adultos interactuar con el entorno e imitan sus acciones. El aprendizaje incidental es el que se obtiene observando a las personas y las actividades que nos rodean, día a día.

Un bebé sentado en una tina de plástico con una batidora en la mano, rodeado de otros utensilios de cocina

Si su bebé tiene una visión limitada, necesitará más explicaciones, descripciones y experiencias repetidas. Esto les ayuda a aprender lo que otros niños aprenden simplemente con el hecho de observar a otros e imitándolos. No se trata de tener que enseñarle cosas a su hijo las 24 horas del día, siete días a la semana. Pero debe tener en cuenta que su hijo no aprenderá de las cosas las cual no puede tocar. Incluso con las cosas que su bebé puede tocar, es posible que necesite más tiempo para explorarlas. Tal vez incluso alguna explicación suya para ayudarle a entender realmente lo que es.

Experiencias Que Fomentan El Aprendizaje

  • Involucre a su bebé en las cosas que hace en casa, aunque su bebé este muy pequeño. Cuando llegue el momento de calentar un biberón, lleve a su hijo a la cocina con usted, cuéntele lo que está haciendo, deje que sienta el aire frío que sale del refrigerador y deje que su hijo escuche los sonidos. Cuando la leche ya se haya calentado con su mano bajo la suya, deje que sienta la leche un poco tibia. De lo contrario, si solamente siempre le lleva la leche en el biberón a su hijo ya caliente, no tendrá forma de saber cómo llega a estar así.
  • Cuando quiera enseñarle algo a su bebé, intente relacionarlo con lo que ya sabe. Por ejemplo, si tiene un gato en casa y a su hijo le gusta acariciarlo y tocarle las patas y las orejas, relacione al león del zoológico con el gato. Ambos tienen pelo, cuatro patas y orejas. Pero los leones son mucho más grandes, no viven con la gente como mascotas y pueden encontrarse en el zoológico o en la selva de manera natural.

Experiencias Prácticas

  • Cuando le enseñe un objeto a su bebé, utilice la técnica llamada mano-bajo-mano. En este método, las manos del niño se colocan encima de las suyas y puede sentir sus movimientos. A su hijo le puede dar miedo extender la mano y tocar algo cuando no puede ver qué es -ese algo y no sabe nada de él.
  • Ofrezcale a su bebé experiencias prácticas. Cuanto más cosas toque su hijo, más aprenderá. Si a su hijo le encanta comer naranjas, deje que le ayude a elegirlas en el supermercado, pongalas en el refrigerador cuando llegue a casa, saque una cuando su hijo quiera comer algo y ayúdale a pelarla. Cuando su hijo beba jugo de naranja, explíquele que está hecho con la naranja que a el le gusta comer. Incluso puede pedirle a su hijo que le ayude a exprimir su propio jugo para que entienda realmente de dónde viene el jugo.
  • Busque lugares a los que pueda llevar a su hijo y que tenga cosas que pueda tocar. Los zoológicos, museos de ciencias y los jardines botánicos suelen ser aptos para niños y dan la facilidad de poder tocar cosas. Si acude a un lugar donde el tocar no forma parte del programa, no tema preguntar si su hijo puede tocar. Si tiene otros hijos, asegúrese de que también ellos tengan una oportunidad.